Hablar de rebeldía, crítica social, estética rock y conciencia social, es hablar de Rebel Root, una marca de ropa y complementos diseñados en Barcelona y producidos por artesanos de distintos rincones del mundo que trabajan bajo los criterios del comercio justo.
Justo antes de Navidad estuve en el estudio de Eva Riu, fundadora y álma mater de la marca, para conocer más de cerca sus creaciones y probarme alguna de ellas.
En su estudio, el Garden, un espacio de co-working muy green y muy inspirador ubicado en el barrio de Gracia de Barcelona, Eva me enseña algunas piezas de Colony Collapse, la primera colección la marca. Sólo verlas, me enamoro de sus camisetas de Tencel (Lyocell), una fibra muy good fabricada a partir de la madera de árboles de eucalipto (en este caso certificados por el Forest Stewardship Council (FSC). Me encanta el Tencel porque es excepcionalmente suave al tacto y muy resistente a las arrugas. Además, cuenta con una increíble capacidad de absorción de la humedad que hace que se adapte completamente a tu temperatura corporal. ¡Una gozada! El toque más cute de las camisetas se lo da las ilustraciones del pintor chileno Víctor Castillo, obras de arte cargadas de crítica social que a nadie dejan indiferente.
A parte del Tencel, en su colección Eva ha utilizado el algodón orgánico y el bambú, tejidos que ha estampado usando técnicas de expresionismo abstracto, como la del batik, típica de Indonesia y Malasia, que consiste en aplicar capas de cera sobre las regiones que no se desean teñir y que, según la propia Eva, permite al autor dejar su “huella” en la prenda.
Todo los proveedores de Rebel Root están certificados por la Word Fair Trade, ya que uno de los principios sobre los que se basa la marca es el comercio justo, junto con el respeto al medio ambiente, la edición limitada y la artesanía. Eva me cuenta, como la mayoría de diseñadores sostenibles a los que estoy conociendo, las dificultades que ha tenido (y que todavía tiene) para encontrar proveedores que se adapten a sus necesidades y que, a la vez, cumplan los criterios de ética y sostenibilidad que ella persigue.
De todas las prendas que Eva ha traído para que me pruebe, decido fotografiarme con Drape RebelRoot, un little black dress tremendamente rebelde.
Como complementos llevo brazalete y collar triangular Forest, fabricados en la India por el artesano Mohammad Ayaz y su equipo.
Las creaciones de RebelRoot se pueden comprar en su tienda online o en tiendas como The VOS (c/Verdi 24) o El Colmado (c/Brosolí 5), en Barcelona; o en Verde Moscú (c/Regina 17) en Sevilla. Además, si estos días tenéis la suerte de estar en la Eco Fashion Week de Berlín, que sepáis que en Poti Poti (Rosenthaler Straße 66) también podéis encontrar algunos de sus productos.
Me despido con esta foto que nos hicimos con Eva para desearos felices fiestas. Hoy la reutilizo para desearos un 2014 lleno de sostenibilidad y con altas dosis de rebeldía.
¡Un apunte final!
Con este post que acabáis de leer inauguro mi colaboración con el blog de Slow Fashion Spain donde a partir de hoy me convierto, por una temporada, en una SlowFashion ‘Itgirl’ que os irá mostrando diferentes outfits de moda sostenible. ¿Mola o no mola? Prometo intentar mejorar la calidad de las fotos… Si hay algún fotograf@ por Barcelona que me quiera echar una mano…
¡Gracias a tod@s por la tremenda acogida! ¡Y por vuestros comentarios!
Muchas gracias por tu visita Sònia! Me encanta tu artículo. Espero que sigas contándonos histórias sobre la moda ética.